El bañador en cuestión es este, es muy sencillo, Mencía tiene 9 años y ya empieza a querer poner bañadores, hasta ahora usábamos braguitas y a mi los bañadores me gustan de niña que en definitiva es lo que es, por eso me gusto tanto este.
Si por delante es bonito por detrás es espectacular, queda precioso puesto.
Y esta es la toalla que le hice a juego
Como siempre primero hago las letras en un folio, después las calco al reves en la fliselina, la pego a la tela y despues a la toalla, le paso un zig-zag de máquina y listo.
Y como ya teníamos otra toalla personalizda, compramos otro bañador a juego.
Bueno bañador, bañador no, es un trikini de la marca boboli, muy alegre y con el que se puede poner más morena que con un bañador.
La toalla en cuestión que ya va por el quinto año de vida, cuando la compre me pareció bastante cara pero la verdad es que el resultado ha sido buenísimo por que mi hija le da uso.
El bordado me lo hicieron en una mercería que se llama Carme, esta cerquita de donde vivo yo, en Bertamirans y es en donde suelo comprar las lanas, ganchillos y en donde me bordaban los mandilones del cole de mi hija, de hecho fue así como me enteré que hacían estas toallas, por que yo de bordar a máquina ni idea.
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